Rejuvenecimiento de Manos
El envejecimiento del dorso de las manos lleva consigo la aparición de muchos cambios en la piel de esta zona. Quizá lo más típico y por lo que más suelen consultar los pacientes es por la aparición de manchas solares o lentigos simples, pero además, se produce una pérdida de la grasa que ocupa esta zona con una piel cada vez más fina y menos tersa. Esto hace que a medida que vamos cumpliendo años, los huesos de las manos sean cada vez más evidentes y que los tendones y las venas del dorso de las manos se hagan cada vez más visibles. Incluso, las pequeñas deformidades que van apareciendo debido a la artrosis que acompaña a la edad, hacen que por el aspecto de las manos seamos capaces de adivinar, sin mucho miedo a equivocarnos, la edad de un paciente. Por esto es importante no olvidar nuestras manos cuando comencemos a tratar los efectos del envejecimiento que van a apareciendo en nuestra cara.
Para corregir todos estos signos de envejecimiento en las manos disponemos de diferentes tratamientos.
- Tratamiento de manchas solares: Se utilizan principalmente tratamientos con Laser o con Luz Pulsada Intensa (IPL). Con ellos se consigue eliminar el pigmento que se va acumulando. Es un procedimiento poco doloroso que elimina el exceso de pigmento sin dañar la piel, lo que lo convierte en un tratamiento seguro. Los días posteriores al tratamiento con Láser o con IPL, la zona va a permanecer algo irritado con la presencia de finas costras que irán despareciendo en unos 10 días aproximadamente. Es importante la protección solar posterior.
- Mesoterapia en el dorso de las manos: Consiste en la inyección de un coctel de vitaminas, antioxidantes, aminoácidos y una cantidad variable de ácido hialurónico en su forma más fluida. Con esto se consigue devolver la tersura a la piel del dorso de las manos y proporcionar una hidratación profunda de las mismas.
- Tratamiento con Radiesse®: Consiste en la inyección de hidroxiapatita cálcica. Es un producto natural, presente un múltiples partes de nuestro organismo, que se inyecta en el dorso de las manos para recubrir las estructuras óseas, vasculares y tendinosas y corregir el aspecto huesudo de las manos envejecidas. Es un proceso poco doloroso, ya que el Radiesse se mezcla con un anestésico, con escaso o nulo periodo de recuperación. Es normal que la zona quede con una sensación ligera de entumecimiento que desaparece en 24-48 horas, pero que en ningún caso impide realizar una vida normal.